En el centro de la historia gráfica de los barbudos, está el legendario fotorreportero español Enrique Meneses, que a fines de 1957, como empleado de Paris Match, se trepó a la Sierra Maestra y tomó las primeras imágenes in situ del foco guerrillero que apenas un año después terminaría entrando a La Habana y derrocando a Fulgencio Batista.
Estas fotos, ya míticas, causaron en su momento un revuelo internacional, e inauguraron el amplio arco visual que acompañó a la Revolución cubana tanto en su fase guerrillera como en los primeros años después del triunfo. Todo el mundo quería fotografiar a los rebeldes todo el tiempo. Meneses estaría luego en muchos otros acontecimientos históricos de gran importancia durante la segunda mitad del siglo XX. Fue también un reconocido periodista que entrevistó a personalidades como Nasser, Salvador Dalí, Martín Luther King y Mohammed Alí.